Buscador de libros
Busqueda avanzadaPrimer capítulo / Extracto [Ver]
- N° páginas : 176
- Medidas: 105 x 170 mm.
- Peso: 350 gr
- Encuadernación: Rústica
Guía sentimental de Venecia VALERI, DIEGO
Venecia es La Meca a la que hay que volver para rezar a la Santa Belleza. Nunca es tarde, pero lee… y visita Venecia, San Pedro te preguntará.
¿Quieres comprar este libro? Busca tu librería más cercana
Sinopsis
Frente a las impresiones de un viajero Valeri nos ofrece desde los emblemáticos y archiconocidos lugares de la ciudad de Venecia una visión que solo alguien que haya deambulado entre el magnífico laberinto es capaz de transmitir: «una felicidad fuera del tiempo; un sentimiento de la vida tan lleno y sosegado, que nos lleva sobre la vida; suficiente para hacernos fantasear que, si pudiéramos ver durante toda la eternidad, desde debajo de las Procuratie Nuove, los cincuenta arcos y las doscientas ventanas de las Vecchie, y la Torre dell’Orologio que las remata o, girando la vista, el ángulo del Palacio Ducal con la Porta della Carta, no tendríamos, durante toda la eternidad, nada más que desear.»
Y también esa Venecia tan personal, a la que en los libros apenas si se le ha prestado atención, de las tiendas y de los gatos, del invierno y del otoño; de Goldoni y las delicias de la Brenta, que se complementa con el recuerdo infantil de Padua y sus Colinas Eugáneas, colmado de constantes referencias literarias tan amadas por el profesor y poeta que fue Diego Valeri.
Autor: Valeri, Diego
Diego Valeri nació el 25 de enero de 1887 en Piove di Sacco, città natale, pero a los pocos meses se instaló en Padua, città materna, donde pasó su infancia y su adolescencia. Allí estudió en el instituto Tito Livio y en la Universidad de Padua; se licenció en 1908 con una tesis en la que relacionaba el teatro francés con el de Paolo Ferrari. Tras asistir a unos cursos de perfeccionamiento en París inició su carrera académica como profesor de instituto en varios centros de enseñanza de Italia. En 1957 pasó a la categoría de profesor emérito, enseñará durante un breve tiempo en la nueva Universidad de Lecce, obtendrá el Premio Viareggio por su poesía y recibirá el doctorado honoris causa en la Universidad de Ginebra. Vivía en Venecia, città dell’anima, donde entre los años 1969 y 1973 presidió el Instituto Véneto de Ciencias, Letras y Artes. Pero sus acentuados problemas cardíacos hicieron que vivir en «la ciudad de piedra y luz», con sus numerosos puentes y sus escaleras de subida y bajada, fuera un calvario, conque en marzo de 1976 se trasladó a casa de una de sus hijas en Roma donde murió el 27 de noviembre de 1976.